La comunidad universitaria debatió ayer la propuesta de creación de un régimen disciplinario para estudiantes, que impulsan autoridades de la Universidad Nacional de Salta,. 

La discusión se dio en el ámbito de una reunión de la Comisión de Interpretación y Reglamento, que propuso un régimen disciplinario a pedido de la directora de Sumarios, Raquel de la Cuesta, en busca del tratamiento que debe dar la Universidad a quienes incurran en delitos como los abusos sexuales denunciados por tres estudiantes.

El consejero estudiantil Emiliano Frascaroli contó que a la reunión asistieron estudiantes de prácticamente todas las facultades y expusieron su rechazo al régimen disciplinario, “con el empuje de la resolución de Humanidades y Naturales que rechazaban el régimen”.

A pesar de ello el vicedecano de Exactas, Daniel Hoyos, “no dio el brazo a torcer, dijo que no va a retirar la firma ni el despacho, va a estar ahí, que espera dos semanas y si no hay una propuesta superadora, lo presentará de nuevo”.

En el intercambio la presidenta de la Comisión de Interpretación, Susana Fernández,  adelantó que presentará su renuncia a la presidencia de la Comisión por las difamaciones que sufrió, pero se mantuvo firme en el acompañamiento al proyecto.

Así las cosas, se resolvió hacer un despacho atendiendo a las resoluciones de los consejos directivos de Humanidades y Naturales, de rechazo al régimen disciplinario, con el fin de girarlo a los directivos para que sea tratado en la próxima reunión del Consejo Superior, que podría ser en 15 días.

La otra propuesta es que el proyecto vuelva a cada Facultad para mayor estudio. Frascaroli subrayó que los estudiantes no aceptan ningún tipo de régimen de disciplina, pero aceptó que pueda realizarse un protocolo de actuación, tras una discusión más extensa con el estudiantado.