El jefe del bloque de Pro en la Cámara de Diputados criticó «la violencia y la intolerancia del Frente para la Victoria» en la fallida sesión por la reforma previsional

«Ellos nos están diciendo que quieren que le vaya mal al Gobierno, hoy y desde diciembre de 2015. Obviamente que no tienen capacidad de voltear a nadie, pero lo dicen». El diputado nacional Nicolás Massot (Córdoba-Unión Pro), jefe del bloque de Pro en la Cámara baja, se refirió así al kirchnerismo por el grupo de diputados de ese espacio que ayer forzó violentamente la suspensión de la sesión en la que se iba a debatir la reforma jubilatoria.

«Lamentablemente, el mismo partido que la líder [Cristina Kirchner] siempre dijo que la manera [de tomar decisiones] era armar un partido y ganar las elecciones, acaba queriendo agarrarse a las trompadas. Quisieron entrar militantes organizados al Congreso, andá a saber qué buscaban hacer», sostuvo Massot. En 2011, la entonces presidenta Cristina Kirchner había dicho: «Si quieren tomar decisiones de gobierno, formen un partido y ganen las elecciones».

El Gobierno vivió ayer una jornada complicada y tensa: presionado por la violencia que se adueñó del interior y de los alrededores de la Cámara de Diputados, el interbloque Cambiemos levantó la sesión en la que pretendía convertir en ley la reforma previsional que impulsa el Gobierno. En diálogo con radio La Red, Massot ratificó que el oficialismo va a «volver a convocar, insistir, apelar al republicanismo» para tratar los cambios.

«Tuvimos el número. Hubo quórum dos o tres veces. La violencia se dio porque esto avanzaba… Vamos a someter [la iniciativa] a votación, como el pueblo nos manda. Pero hay que saber que es absolutamente legal un DNU», planteó el jefe de la bancada Pro en Diputados.

El presidente Mauricio Macri tiene en su poder un decreto de necesidad y urgencia(DNU) sobre la reforma previsional que ya rubricaron los ministros, pero la primera opción para dejar atrás el fracaso político que significó la suspensión del debate de ayer en la Cámara baja es convocar a los gobernadores e intentar una nueva sesión el lunes.

Fuente: La Nación