El artefacto tecnológico realiza 23 pasos para poder completar la técnica de reproducción asistida.
Después de someterse a varios procedimientos de fecundación in vitro (FIV) sin lograr quedar embarazada, una mujer de 40 años dio a luz a su bebé con la ayuda de una máquina que inyecta esperma y es operada con inteligencia artificial.
Para esto, investigadores de la empresa de biotecnología Conceivable Life Sciences, de Nueva York, (Estados Unidos), contactaron a una pareja que presentaba dificultades para concebir e implementaron material genético de donantes anónimos.
De acuerdo con la información revelada por el diario británico The Sun, el doctor Jacques Cohen, decidió desarrollar un artefacto tecnológico que tuviera la capacidad de reducir los errores humanos durante el proceso de reproducción.
En ese sentido, con ayuda de un equipo especializado, el hombre consiguió crear una máquina que se enfoca en llevar a cabo 23 pasos, los cuales garantizan la correcta ejecución de la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI).
Frente a esto, Cohen resaltó que algunos estudios científicos han demostrado que este procedimiento requiere un alto grado de precisión, debido a que al hacerlo de forma manual, puede verse afectado por el desempeño de los embriólogos.
También destacó que en ocasiones las personas se casan, pero tienden a distraerse con otras situaciones de la vida cotidiana y laboral, lo que a largo plazo reduce las probabilidades de fertilización y nacimientos.
Para el procedimiento se utilizó material genético de donantes anónimos. Foto: iStock.
En cuanto al funcionamiento del robot inyector, el doctor explicó en la revista «New Scientist», que durante la primera fase, la máquina utiliza un modelo de inteligencia artificial, que se encarga de seleccionar los espermatozoides más sanos para la fecundación.
Lo siguiente es inmovilizar las células sexuales, por lo que el artefacto utiliza un láser sobre sus colas para facilitar el método de recolección. Al tenerlos en su poder, el sistema procede a introducirlos en los óvulos solicitados.
Según Cohen, este proceso fue probado de manera similar hace algunos años, el cual permitió el nacimiento de dos bebés en Estados Unidos, con la única diferencia de que ciertas etapas no fueron efectuadas por una máquina.
Tras el nacimiento exitoso del bebé concebido por el robot inyector, la profesora Joyce Harper, de la University College de Londres, resaltó que, si bien la prueba resultó ser emocionante, aún hacen falta más estudios que demuestren que este método tiene un impacto significativo en las tasas de natalidad.