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El equipo de
Luis Enrique ganaba con comodidad por 3 a 1 ante el Celta de Vigo y el
rosarino fue derribado en el área. El propio Messi se hizo cargo del
penal pero, en lugar de ir por su segundo tanto personal, decidió
habilitar a Suárez, que llegó corriendo desde atrás y no perdonó.
Cabe destacar que, pese a lo insólito de la jugada, esta acción es
legal y ya se ha visto en ocasiones anteriores, como la del recordado
Johan Cruyff jugando para el Ajax en 1982 o la del francés Robert Pires
jugando para el Arsenal, aunque en aquella oportunidad el resultado no
fue el esperado.
El Barsa ganó 6 a 1 y le sacó 3 puntos al Atlético Madrid con un
partido menos. Suárez en tres ocasiones, Messi, Neymar y Rakitic
convirtieron los goles catalanes.
https://youtu.be/HLgmHCIuZ3I