Es por la toma de una comisaría en La Boca en 2004. No irá preso hasta que la sentencia quede firme en la Cámara de Casación.
El líder piquetero Luis D’Elía fue condenado esta tarde a cumplir cuatro años de prisión por la comisión de cinco delitos a raíz de la toma de una comisaría en 2004 y absuelto por la irrupción en Plaza de Mayo durante una protesta contra el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner en 2008.
Pese a que temía ir preso, el también líder del partido Miles no fue detenido y ello sólo ocurrirá cuando la condena sea eventualmente confirmada por la Cámara Federal de Casación Penal, según explicaron fuentes judiciales. La condena incluye una inhabilitación para ejercer cargos públicos durante ocho años y una prohibición de salir del país sin autorización del tribunal.
La sentencia fue dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal Federal 6 (TOCF6), integrado por los jueces Julio Panelo, José Martínez Sobrino y Fernando Canero. La fiscal Gabriela Baigún había pedido la aplicación de una pena de cuatro años y ocho meses de prisión por la comisión de los delitos de privación ilegal de la libertad y daños, por la toma de la comisaría 24, y por incitación a la violencia colectiva, a raíz de la contramarcha realizada hace nueve años para defender las retenciones aplicadas por el gobierno kirchnerista a las exportaciones del campo. Pero por este último delito fue absuelto.
D’Elía fue encontrado culpable, en cambio, por cinco delitos ocurridos en la toma de la comisaría 24, en el barrio de La Boca, en 2004. Ellos son los de atentado a la autoridad agravado, lesiones leves, instigación a cometer delitos, privación ilegal de la libertad y usurpación. La paradoja es que la causa se mantuvo viva durante trece años porque la otra causa que se le abrió por los incidentes del 2008 en la contramarcha a Plaza de Mayo arrastró a ella y evitó la prescripción.
Tres horas antes de la lectura del veredicto, D’Elía hizo uso de las «últimas palabras» que le concedió el tribunal y aprovechó el apoyo de sus seguidores dentro de la sala de audiencias en los tribunales federales de la Avenida Comodoro Py para hacer un alegato de contenido político y presentarse como un perseguido del actual gobierno, tal como lo había hecho en los últimos días.
«Se busca castigar la protesta social, soy un símbolo de la resistencia de los 90 y este juicio está hecho a expreso pedido de Macri, al sólo efecto de ponerme preso a mi», sostuvo D’Elía, quien avisó que volvería a tomar la comisaría. Algo similar dijo al salir de Comodoro Py, luego del veredicto. «No hay condena que nos pare», exclamó ante unos 400 seguidores que lo aplaudieron y comenzaron a gritar «Macri, basura, vos sos la dictadura».
«Si tengo que ir a la cárcel cuatro años y ocho meses por esto, a los 60 años y después de 40 de militancia, lo hago con orgullo y dignidad y mirando a la cara», añadió el piquetero, quien de todos modos no irá inmediatamente a prisión sino hasta que la condena sea confirmada. El propio D’Elía dijo al salir del edificio que apelará ante el tribunal superior, la Cámara Federal de Casación Penal.
D’Elía se había presentado el domingo a la noche en el programa Periodismo Para Todos (PPT), de El Trece, donde fue entrevistado por el periodista Jorge Lanata y salió en defensa de ex funcionarios kirchneristas encarcelados como el ex vicepresidente Amado Boudou y el ex ministro de Planificación Julio De Vido.
El piquetero responsabilizó al gobierno de Mauricio Macri por la condena en su contra y sostuvo que los jueces que lo condenaron responden al Poder Ejecutivo. Sus dos compañeros de causa, Angel «Lito» Borello y Luis Bordón fueron absueltos porque la Fiscalía no había pedido pena para ellos.
«No creo en este tribunal. Más allá del fallo, el único objetivo es condenar a D’Elía», había dicho el ex diputado bonaerense al llegar a los tribunales. En su defensa, la semana pasada, el abogado Adrián Albor y el dirigente social Juan Grabois, habían alegado que los delitos de la comisaría estaban prescriptos y que la contramarcha a Plaza de Mayo de 2008 fue una manifestación social en la creencia de que estaba en peligro el gobierno de Cristina Fernández y el sistema democrático y que ya había sido condenado por ese hecho.
El dirigente piquetero había liderado en 2004 la toma de la comisaría 24, en el barrio de La Boca, en reclamo por la muerte de un dirigente social barrial allegado a él, Martín «Oso» Cisneros, y por la que responsabilizó a las autoridades y efectivos de esa dependencia policial.
El también titular de la Federación Tierra, Vivienda y Habitat ya había sido condenado en noviembre de 2011 a cumplir cuatro días de prisión en suspenso por una lesión leve producida en perjuicio de un manifestante que había acudido a la Plaza de Mayo en 2008 a protestar contra el gobierno de Cristina Fernández, Alejandro Gahan.
La toma ocurrió hace más de trece años. Fue un 26 de junio de 2004, cuando el entonces diputado de la Provincia de Buenos Aires ingresó junto a 40 militantes a la Comisaría 24 para reclamar la detención de un hombre que había matado a Cisneros.
Fuente: Clarín