Se espera que el sector sea motor de la recuperación pero empresarios advierten por falta de materias primas. Ayer el Gobierno le pidió más información a las alimenticias por aumentos injustificados.
Luego de haber puesto en marcha las reuniones para arribar a un consenso en lo que hace a precios y salarios con empresas y sindicatos del rubro de la alimentación, el Gobierno convocó a la cadena de valor de la construcción. La reunión será hoy a las 10 en las oficinas del Ministerio de Desarrollo Productivo. El sector será clave para la reactivación este año pero el costo de los materiales viene escalando y faltan insumos.
Si bien las tensiones dentro de la cadena de valor se relajaron, la preocupación por la falta de insumos continúa. Durante el 2020 el Gobierno decidió aplicar, con aval de los empresarios, la ley de abastecimiento y ahora monitorea en conjunto con el sector privado el despacho de materiales.
La escasez de materias primas pone en jaque el plan de que el sector sea el pilar de reactivación. El presupuesto de obras públicas previsto para 2021 duplica al de los últimos dos años y además se puso en marcha un blanqueo por el cual esperan que ingresen unos u$s5.000 millones.
No obstante, los principales empresarios del sector recalcan que con esta velocidad de despacho la actividad no podrá trabajar al 100%. “La situación tiende a normalizarse, pero todavía tendremos varios meses con faltantes” dijo el presidente de la Cámara Argentina de la Construcción, Iván Szczech, que ya confirmó su presencia para la jornada de hoy.
En el sector apuntan a alinear sus variables en torno al 29% de inflación que trazó Martín Guzmán en el presupuesto. “Me imagino un año con crecimiento del poder adquisitivo de los trabajadores de la construcción”, adelantó Szcech. Al mismo tiempo, afirmó: “Nosotros venimos haciendo paritarias con la UOCRA en donde de mínima es acompañar la inflación, pero tratando de dar un extra. En nuestro sector la gente tiene un costo superior al de la inflación porque la canasta básica sufre mayores aumentos. Estamos en un nivel socioeconómico que necesita esa recomposición”.
Para que los salarios le ganen a la inflación el Gobierno pone el foco en los precios de la canasta básica. De acuerdo a lo que pudo reconstruir Ámbito del encuentro que el Ejecutivo sostuvo ayer con empresas de alimentos y bebidas, los fabricantes de bienes finales cargaron las tintas sobre los proveedores de insumos, sin especificar nombres de empresas, y argumentaron que recibieron aumentos de hasta el 30% en dólares. Por el otro lado, quienes se dedican a la producción de semillas, envases y fertilizantes, negaron la situación.
La impresión de los empresarios presentes fue que hay una fuerte preocupación en el Gobierno por el aumento de los precios de los alimentos. En este contexto, señalaron que esperan una etapa de mayor intervención que estará marcada por la revisión de las estructuras de costos de los integrantes de la cadena de valor.
En rigor, el Ministerio de Desarrollo Productivo confirmó en un comunicado que le pidió a los empresarios “que presenten información adicional para poder determinar en qué lugar de la cadena se generaron los aumentos injustificados”. Fuentes del Gobierno señalaron que “las empresas se mostraron dispuestas a entregar la información requerida”.
En Desarrollo Productivo apuntan a frenar el arrastre de toda la cadena desde los insumos. “Si el dólar se mueve en torno a un 25% como anticipó el Gobierno no deberíamos tener un año con muchos sobresaltos”, confirmó a este medio el CEO de Syngenta, Antonio Aracre.
Por el sector privado participaron representantes de las empresas Bayer-Monsanto, Pro-Fértil, Tetra Pak, Smurfit Kappa, Dow, Aluar, Ternium Argentina, Agrofina, Atanor, Red Surcos, Vidriería Argentina S.A., YPF, BASF, FMC y ADAMA, Mondelez, Zuccardi, Quilmes, Aceitera General Deheza (AGD), Casamen SA, Morixe Hermanos, Ledesma, Nestlé, Mastellone, Molinos Río de la Plata, entre otros.
Fuente Ámbito