Se despidió de local, jugando en Málaga y para su país.
Fin de una era. A los 38 años, Rafael Nadal puso punto final a una carrera excepcional. El español cayó junto a su compañeros en cuartos de final de la Copa Davis, cuya etapa final se disputa en Málaga. La derrota del zurdo en el comienzo de la serie, frente a Botis Van de Zandschulp, fue el último partido oficial para él, que marcó un antes y un después en la historia, sobre todo para el tenis sobre polvo de ladrillo.
El 14 veces ganador de Roland Garros, que protagonizó con Roger Federer y Novak Djokovic una puja tremenda por ser el mejor del planeta, transmitió pasión con su juego hasta el último punto que pudo jugar.
Con el suizo, que este martes lo felicitó con una emotiva carta, protagonizaron una batalla deportiva que solo se puede comparar por su duración a la que sostuvieron Lionel Messi y Cristiano Ronaldo en el fútbol.
Si bien los problemas físicos lo acecharon en los últimos años, se retira del tenis profesional a una edad bastante avanzada y con 22 títulos de Grand Slam en su espalda.
La caída frente a Vande Zandschulp, de Países Bajos, fue 6-4 y 6-4 sobre la carpeta malagueña, tuvo la particularidad de que el ganador casi no festejó el triunfo, a sabiendas del rival que tenía en frente. Apenas quedó para la estadística cuando unas horas más tarde se concretó la eliminación de España en cuartos de final de la Davis a manos de los neerlandeses.
Carlos Alcaraz igualó la serie ante Tallon Griekspoor tras imponerse por 7-6 y 6-3, pero en el dobles fue victoria de Wesley Koolhof y Botic Van de Zandschulp en sets corridos (7-6 y 7-6) a la dupla de Alcaraz y Marcel Granollers.
El 2-1 en favor de Países Bajos le puso punto final a la carrera de Rafa.
La palabra de un Nadal emocionado
Los últimos torneos que jugó estuvieron cargados de emoción, como cada vez que deja de jugar un deportista de esta magnitud, que trascendió su disciplina y es respetado por propios y extraños. «He tenido mucha suerte. Solo quiero que se me recuerde como una buena persona y un chico que persiguió sus sueños… y consiguió más de lo que jamás había soñado», declaró Rafa en la cancha.
«Es un día emotivo. Sabía que podía ser mi ultimo partido, los momentos previos han sido difíciles de gestionar, pero he intentado hacerlo de la mejor manera posible. A veces es difícil pero no puedo agradecer lo suficiente a toda la gente que me ha ayudado siempre», expresó Nadal, en conferencia de prensa.
«No voy a decir lo siento, esto es deporte, lo he intentado y uno no puede controlar el nivel que tiene. Puede controlar la actitud, energía y determinación y eso no me ha fallado. Solo que no he encontrado el nivel necesario para competir», admitió.