Ruth Gottesman, de 93 años, donó parte de su fortuna para que la escuela de medicina se vuelva gratuita para siempre.
Un exprofesora de 93 años de una facultad de medicina privada de la ciudad de Nueva York donó mil millones de dólares a la universidad para que se vuelva gratis para los estudiantes. Su donación fue tal que ningún estudiante tendrá que volver a pagar cuotas ni matrícula, según anunció en una conferencia de prensa. Los gritos de alegría de los alumnos fueron captados en un video que se volvió viral.
La donación, una de las mayores jamás hecha a una institución educativa en EEUU, hará que la matrícula anual de casi 60.000 dólares sin descuento sea gratis para los estudiantes.
“Este regalo histórico -el mayor hecho jamás a una escuela médica en el país- asegurará que ningún estudiante de la Escuela de Medicina Albert Einstein tenga que pagar su matrícula nunca más”, según afirmó el centro educativo, que se encuentra en el Bronx, uno de los barrios más humildes de Nueva York.
La Escuela emitió un comunicado en agradecimiento, en el que señalan que la donación de Gottesman es “transformadora” para la escuela y que esperan que atraiga a estudiantes “con talento que de otra manera no se habrían podido plantear estudiar Medicina”. “Esta donación revoluciona radicalmente nuestra capacidad de seguir atrayendo estudiantes comprometidos con nuestra misión, no solo aquellos que pueden pagarlo”, explicaron.
Gottesman fue profesora de pediatría en la Einstein y su marido, David “Sandy” Gottesman, era un financista de Wall Street que acumuló una fortuna de 3000 millones de dólares. Fueron importantes donantes del centro educativo durante toda su vida.
Sandy, con quien Ruth estuvo casada durante 72 años, murió en septiembre de 2022 a la edad de 96 años. “Me dejó, sin que yo lo supiera, una cartera completa de acciones de Berkshire Hathaway”, el conglomerado multinacional de Warren Buffet, dijo la profesora al diario The New York Times. Las instrucciones eran muy simples: “Hacé lo que creas correcto con el dinero”.
Durante años, la profesora había entrevistado a cientos de futuros alumnos, por lo que conocía de primera mano cuál era la principal dificultad a la que se enfrentaban: las cuantiosas cuotas que se volvían un pesado lastre para los que optaban por préstamos universitarios o directamente les impedía anotarse en la carrera. Según cifras de la escuela, más de la mitad de los alumnos deben más de US$200.000 cuando se gradúan, indicó la BBC.
El generoso regalo “liberará y animará a nuestros estudiantes, permitiéndoles realizar proyectos e ideas que de otro modo serían prohibitivos”, dijo el decano de la universidad, Yaron Yomer.
Gottesman espera que la donación permita abrir la escuela a muchos estudiantes “cuya situación económica es tal que ni siquiera pensarían en ir a la facultad de medicina”, le dijo al New York Times.
La profesora emérita dijo sentirse muy agradecida a su difunto esposo por dejarle estos fondos y por “tener el gran privilegio de hacer esta donación a una causa tan valiosa”. Alrededor de la mitad de los estudiantes de primer año de la Einstein son de Nueva York y en torno al 60% son mujeres. Las estadísticas publicadas por la escuela muestran que cerca del 48% de sus alumnos son blancos, el 29% asiáticos, el 11% hispanos y el 5% negros.
Gottesman dijo que a veces se pregunta qué habría pensado su difunto marido de su decisión. “Espero que esté sonriendo y no frunciendo el ceño”, se río. “Pero él me dio la oportunidad de hacer esto, y creo que estaría contento; eso espero”, concluyó.