Durante la pandemia, el promedio de ocupación de camas fue del 20%. Están capacitando al personal para la aplicación de la vacuna contra el virus.

Desde el inicio de la pandemia, el Gobierno provincial decidió que el Centro de Convenciones de Limache sea preparado para albergar a pacientes con síntomas leves de COVID-19 y así poder descomprimir las camas del hospitales de la provincia.

Desde diferentes sectores se había cuestionado la elección de ese lugar para montar el dispositivo. En este tiempo el promedio de ocupación fue del 20%.

El dispositivo entró en actividad el 8 de septiembre y en la actualidad se encuentra sin pacientes. Desde que se puso en marcha atendió a 268 personas infectadas con coronavirus que fueron derivados de hospitales o del Sistema de Atención Médica para Emergencias y Catástrofes (Samec) para finalizar el tratamiento.

La mayoría de los salteños que fueron atendidos allí evolucionaron favorablemente, lo que permitió el recambio permanente de camas y el promedio de internados se mantuvo entre 23 y 28 personas, funcionando aproximadamente a un 20 por ciento de su capacidad total. Este dispositivo de contención se preparó con 146 camas divididas en cuatro salas.

«El Centro de Convenciones está sin pacientes en este momento y el número de gente con coronavirus ha descendido en todos los hospitales de la provincia. Nosotros somos el último eslabón en la cadena de contención de COVID-19 y que no tengamos pacientes es un éxito ya que funciona en conjunto con los otros hospitales», explicó la coordinadora de Recursos Humanos del Centro, Carolina Guzmán.

Entre los datos positivos que destacó la funcionaria provincial es que dentro del personal que trabajó en el lugar, solo dos personas dieron COVID positivo. Explicó que esos contagios fueron comunitarios o sea fuera de la institución. Además, destacó que no hubo muertos dentro de los pacientes que tuvo que atender el hospital de campaña.

Personal

Todo el personal que trabajó durante estos meses fue 138, si contamos los servicios que fueron tercerizados. Dentro de ese total, 84 personas son contratadas entre los que se encuentran médicos, enfermeros, personal de mantenimiento hospitalario y administrativos.

También se creó un equipo kinesiológico que trabajó en la recuperación de los pacientes ya que la COVID deja secuelas respiratorias y motoras en el paciente. También se les enseñó a realizar ejercicios posalta para que puedan desarrollar en sus domicilios.

«Desde el mes de abril a todo el personal que estaba destinado a este lugar y al que se fue incorporando se lo capacitó en medidas de bioseguridad y todo lo que tenga relación con la COVID. Se incorporaron recursos humanos desde otros hospitales y se trabajó con otras instituciones del Estado que hacen el acompañamiento», detalló Carolina Guzmán.

Todo el capital humano ha sido capacitado y no hubo ningún accidente laboral. «Dentro de ese esquema, todo lo que hemos podido gestionar ha sido muy bueno. Fue todo un desafío desde un principio. Al inicio había profesionales que estaban reacios a venir al Centro de Convenciones, pero cuando llegaron y vieron que había un protocolo serio donde había áreas verdes o rojas de acuerdo a la carga viral, fue distinto», expresó la funcionaria provincial.

Son muchas las áreas que se tuvieron que coordinar, además de la preparación de los protocolos sanitarios para que todo el personal sienta tranquilidad, sobre todo para aquellos que estaban trabajando con pacientes con COVID. «Se tomaron todos los recaudos para evitar la circulación dentro de la institución. Muchos de ellos cuando conocieron cómo era la situación dentro del Centro de Convenciones no se querían ir de acá», agregó.

La pandemia también desnudó los desafíos que tuvo que enfrentar la salud pública para contener el avance del coronavirus y esa situación también fue difícil de sobrellevar.

«Tampoco es fácil coordinar las distintas realidades para que todo este personal pueda trabajar en forma conjunta, así que eso también fue un desafío.

Siento una gran admiración por todo el personal que trabaja aquí porque ha tenido realidades duras a nivel personal y económico y el nivel de ausentismo que tuvimos fue mínimo. No fue fácil. El personal nunca puso excusas y el paciente siempre fue la prioridad”, expresó Carolina Guzmán.

Vacunación

Sin pacientes con coronavirus, en el Centro de recuperación se está capacitando a todo su personal que va a estar afectado para llevar adelante todo lo que va a ser la campaña de vacunación contra la COVID-19. Es una capacitación que no solo se centra en que el personal sepa vacunar sino que pueda realizar toda la carga de datos correspondientes en un sistema que tiene Salud.

“Por un lado fue un gran alivio que no haya pacientes porque significa que se ha alivianado la carga comunitaria del virus, pero también fue un impacto porque ahora se inicia una segunda etapa donde comenzamos con la parte de vacunación que también es tan importante”, expresó la coordinadora de Recursos Humanos del Centro de Convenciones, Carolina Guzmán, quien trabajó en conjunto con la doctora Carmen de la Serna.

Desde que se pensó a este edificio que debía funcionar como un centro de atención COVID hubo una cadena de situaciones y circunstancias en el que hubo ciclos que se fueron cumpliendo.

“La primera etapa, que fue en el momento que levantamos las alfombras para crear un hospital de campaña, con protocolos que no fueron fáciles porque estábamos ante una enfermedad nueva y de la cual no estábamos preparados. Ahora el plan continúa con la vacunación y a la espera de que no haya una segunda ola”, expresó la coordinadora.

Fuente : El Tribuno