Salta no mira desde afuera: juega fuerte.
En un movimiento político de creciente impacto nacional, el gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, se posiciona como uno de los principales articuladores del recientemente conformado Bloque Federal, integrado por mandatarios provinciales con una fuerte agenda de descentralización y defensa del federalismo.
El Bloque Federal —que agrupa a gobernadores de Salta, Misiones, Río Negro y Neuquén— fue anunciado recientemente como una propuesta para impulsar la voz de las provincias en el Congreso y reclamar mayor protagonismo en las decisiones nacionales.
Sáenz habría sido clave en negociar los lineamientos estratégicos del bloque, negociando con sus pares y promoviendo su visión de un federalismo «real», en el que no solo se busque el equilibrio fiscal, sino también institucional.
En el marco de estas conversaciones, el gobernador salteño se reunió con legisladores del bloque Coherencia, alejado del oficialismo, para fortalecer el respaldo parlamentario a sus prioridades provinciales. Además, ha mantenido encuentros con figuras clave del Ejecutivo nacional, como el jefe de Gabinete Manuel Adorni y el ministro del Interior Diego Santilli, donde abogó por que se respete la autonomía de las provincias y se garantice el financiamiento de obras estructurales.
La creación del Bloque Federal también llega en un momento clave: con el Presupuesto 2026 en discusión, varios gobernadores buscan formar una bancada consolidada que tenga peso para negociar obras y recursos para sus provincias.
Sáenz, por su parte, insiste en que el sur y el norte del país no sigan siendo relegados. En sus últimas intervenciones públicas, ha alertado sobre la necesidad de una distribución más equitativa de la riqueza, mayor inversión en infraestructura, y reglas claras para atraer inversiones a las provincias.
Conclusión: La figura de Sáenz, lejos de quedarse en el plano provincial, parece estar escalando en la escena nacional como un catalizador para reordenar el mapa político territorial, impulsando un bloque que podría convertirse en un actor decisivo de cara a las grandes definiciones legislativas del próximo período.
