River perdió con Colón y dio otro paso en falso en el Monumental.
Con una nueva ilusión a cuestas y el objetivo de cortar la sequía de torneos locales, River debía recibir a Colón en el Monumental, para intentar comenzar con el pie derecho en la Liga Profesional de Fútbol. Pero el campeón defensor lo sorprendió de arranque y se quedó con los tres puntos al imponerse 2-1.
Aunque concentró a todos sus habituales titulares y se especulaba con que podía llegar a utilizarlos, Marcelo Gallardo optó finalmente por la rotación y armó una alineación pensando no solo en el encuentro de este domingo sino también en el del miércoles contra Argentinos Juniors por la Libertadores.
El equipo alternativo del Millonario tuvo serias dificultades para acomodarse en la cancha contra el Sabalero que, por el contrario, entró decidido a imponer sus condiciones. Apenas iban 2 minutos cuando un preciso centro de Facundo Mura encontró a Rodrigo Aliendro, quien, habilitado ante una mala salida de la defensa local, pudo girar en el área y definir cruzado para poner el 1-0.
Luego de la apertura del marcador, los dueños de casa mostraron un atisbo de reacción encabezado por José Paradela y Jorge Carrascal, sus principales generadores de juego esta tarde. La situación, de hecho, pareció mejorar cuando Gonzalo Piovi se fue expulsado antes del cuarto de hora por bajar desde atrás al colombiano que encaraba directo hacia el gol.
Sin embargo, la tímida reacción riverplatense apenas alcanzó para incomodar un rato a los santafesinos hasta que volvieron a hacer pie en el campo incluso en inferioridad numérica.
Un River sin muchas nociones ofensivas demostró otra vez su fragilidad en defensa y, después de una brillante combinación en ataque entre Yéiler Góez y Facundo Farías, el ex Atlético Nacional empujó la pelota a la red y amplió la diferencia en el resultado.
Evidentemente disconforme con la producción de sus dirigidos hasta el descanso, el Muñeco movió el banco de suplentes e incluyó a Gonzalo Montiel, Matías Suárez y Federico Girotti para darle nuevas variantes al equipo de mitad de cancha hacia adelante.
Pero la dinámica del encuentro no se modificó demasiado. La falta de lucidez de los de Núñez le facilitó la tarea a un Colón que se replegó un poco más para sostener la ventaja y se dispuso a jugar de contragolpe y a resistir los envíos aéreos que caían cerca de su arco.
Ni siquiera el ingreso de Nicolás De La Cruz, que aportó un poco más de cambio de ritmo, alcanzó para ver a un Millonario del todo punzante. A eso se sumó la buena actuación del arquero Ignacio Chicco, el último obstáculo para impedir el descuento.
Los minutos finales fueron los mejores para los de la Banda Roja. De arremetida, Suárez marcó tras un doble cabezazo en el área y Girotti y Braian Romero contaron con chances para alcanzar el empate.
Fue un nuevo paso en falso para River, que no tendrá tiempo para lamentos y a partir de mañana deberá enfocarse en la revancha de los octavos de final de la Copa en La Paternal. El conjunto de Eduardo Domínguez extendió su gran momento y festejó un valioso triunfo.
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