El capitán del Barcelona perdió los estribos en la final de la Supercopa de España, que su equipo perdió ante el Athletic de Bilbao, al pegarle una piña a un rival por la cual vio la roja y logró algo inédito en su carrera.
Lionel Messi, el capitán y máximo ídolo del Barcelona, perdió los estribos en la final de la Supercopa de España, que su equipo perdió ante el Athletic de Bilbao, al pegarle una piña a un rival en una acción del juego, mientras veía cómo a su equipo se le esfumaba el título, que le valió la expulsión.
Cuando se jugaba tiempo de descuento en el segundo tiempo suplementario, ya que en los 90 minutos terminaron empatados 2 a 2 y el triunfo del equipo bilbaíno llegó en la prórroga, Barcelona estaba en ataque cuando Asier Villalibre se interpuso en la carrera de Messi para evitar que se acercara a su área.
Allí, el rosarino no se bancó el asedio del rival y terminó pegándole una piña que el árbitro no vio, pero los asistentes del VAR le avisaron rápidamente y, tras chequear la jugada, le mostró la roja.
Con esta expulsión, Messi logró algo inédito, ya que nunca había visto la tarjeta roja en toda su carrera vistiendo la camiseta del Barcelona. Así, el crack rosarino fue expulsado por primera vez en 753 partidos jugados en el club catalán.
Las únicas expulsiones de la carrera de Messi habían sido en la Selección argentina. La primera fue en 2005, el día de su debut con la mayor ante Hungría, y la segunda en 2019, en el partido por el tercer puesto de la Copa América de Brasil ante Chile.
Fuente : MDZ