El conductor hizo un viaje relámpago a Necochea para celebrar su día de una forma distinta pero rodeado de afecto.

El fin de semana, Marcelo Tinelli se dio el gusto de celebrar el día del padre en un lugar que lo llena de paz: Necochea, ciudad natal de su mujer, Guillermina Valdes. Pero esta vez, el viaje tuvo un condimento extra que fue el hecho de poder compartirlo con sus hijos, como cuando ellos eran chicos.

A excepción de Juanita, que no pudo ir con ellos, Mica, Cande, Fran y Lolo estuvieron disfrutando unos días al 100% con su papá. Licha López, el novio de Mica, también fue de la partida. Ni siquiera el frío de esta época impidieron que visitaran la playa en varias oportunidades.

La estadía se extendió hasta el lunes, ya que por el partido de Argentina en la Copa América, Marcelo no tenía programa y el martes por la mañana, emprendieron la vuelta a casa con las energías renovadas después de dos semanas muy difíciles, en las que toda la familia estuvo pendiente de la salud de Soledad Aquino, ex mujer de Tinelli y mamá de Micaela y Candelaria.

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