13-11-20 Gracias a su alto contenido en ponifenoles, el vino tinto elimina los radicales libres y protege el corazón. Su consumo siempre debe ser moderado.
Muchos médicos aconsejan a sus pacientes beber vino tinto cada día, porque hace bien a la salud. Por supuesto, se refieren a solamente una copa.
Muchas personas siguen ese consejo al pie de la letra pero no siempre saben las verdaderas razones por las que el profesional les recomienda esa acción, simplemente la cumplen por quién lo dice.
Conoce cuáles las ventajas de beber vino cada día.
Una copa diaria, la receta especial
El vino es saludable cuando se bebe en las cantidades apropiadas (que, según los expertos, es de una copa por día). Pero atención, porque se trata de beber cualquier vino: la variedad debe ser tinto.
Tampoco es cuestión de consumirlo en el momento que se quiera: tiene que ser durante la cena o el almuerzo.
Todo esto se concluyó luego de varios estudios en los que se concluía que una copa de vino tinto al día ayudaría a prevenir muchas enfermedades cardiovasculares, tanto en los hombres como en las mujeres.
Beber vino ayudaría a tratar dolencias y trastornos tales como la diabetes, la demencia o la osteoporosis.
Si bien el vino es una de las bebidas con alcohol más antiguas del mundo, no hace tanto tiempo que se han descubierto estas ventajas.
Antes se bebía únicamente para divertirse, relajarse, acompañar banquetes o disfrutar de un brebaje diferente.
Beneficios de beber vino a diario
Estas son las ventajas confirmadas sobre el consumo de una copa de vino tinto por día:
1. Reduce el riesgo de fallecimiento
En Europa, las investigaciones afirman que el consumo de entre 22 y 32 gramos de alcohol por día tiene un efecto “protector” de la salud, evitando la mortalidad por muchas causas.
En Dinamarca, Francia e Inglaterra se dice también que beber vino de manera moderada es mejor que la cerveza u otras bebidas alcohólicas.
2. Disminuye el efecto del cigarrillo
El vino serviría para regular los daños que genera el tabaco en los vasos sanguíneos, ya sea para relajarse o vasodilatarse.
Sobre todo, tiene efectos positivos en el endotelio, una capa de células que reducen la fricción entre los vasos linfáticos y sanguíneos, y en el corazón.
3. Previene enfermedades cardiovasculares
Es uno de los efectos más conocidos del vino tinto, siempre y cuando se consuma según la proporción adecuada y regularmente.
Los científicos sostienen que el vino tinto reduce la posibilidad de padecer una enfermedad coronaria, reduciendo la producción de colesterol malo (LDL) y aumentando el bueno (HDL).
4. Efectos anticoagulantes y antitrombóticos
Esto no sólo se consigue bebiendo vino cada día, sino que se ha detectado que los consumidores esporádicos tienen menor cantidad de proteína fibrinógena, lo que promueve la formación de coágulos de sangre.
5. Previene la aparición de aterosclerosis
Esta es una de las enfermedades causadas por la degeneración de las arterias. El vino permite contrarrestar sus síntomas y hasta puede evitar que aparezca.
La aterosclerosis sucede cuando los vasos sanguíneos pierden su capacidad de relajarse.
El alcohol de esta bebida ayuda a los vasos a permanecer saludables gracias a la formación de óxido nítrico, sustancia fundamental en la relajación vascular.
6. Equilibra la tensión arterial
Si bien se sabe que el consumo excesivo de alcohol provoca hipertensión, beber una copa de vino al día (150 ml) tiene el efecto contrario para las personas que sufren de este problema, ya que baja la tensión luego de una comida.
7. Reduce la formación de cálculos renales
La ingesta diaria de vino tinto disminuye el riesgo de desarrollo de piedras en el riñón.
8. Evita la aparición de la enfermedad de Alzheimer
Las investigaciones demostraron que el resveratrol (un compuesto del vino tinto) produce efectos neuroprotectores, ayudando a que esta condición no se desarrolle.
Entre otras ventajas del vino, se destacan:
-Previene la demencia.
-Reduce el riesgo de padecer artritis reumática.
-Previene la gripe y los resfríos.
-Minimiza la posibilidad de sufrir cáncer de garganta.
-Ayuda a mantenerse despiertos o en vigilia.
-Sirve para hacer la digestión.
-Mejora la circulación sanguínea.
-Reduce los riesgos de padecer diabetes.
-Previene el envejecimiento prematuro de las células de la memoria.
-Mejora las várices.
-Evita el cáncer de próstata.
-Favorece la asimilación de las proteínas.
-Mejora la piel.
-Ayuda en la visión y previene enfermedades como la retinopatía diabética.
-Reduce el dolor y las molestias de las hermorroides.
-Disminuye las alergias por sus propiedades antihistamínicas.
-Evita la formación de coágulos de sangre.
Por qué beber vino tinto
Muchos se preguntarán por qué tiene que ser vino tinto y no otro tipo (rosado, blanco, espumoso). Las razones son variadas. Para ello, nada mejor que descubrir un poco más sobre esta bebida.
Se elabora con el mosto de uvas moradas, las cuales se recogen de la vid en el proceso llamado vendimia.
Los racimos se pueden recolectar a mano o con tijeras, y también con máquinas especiales.
Los vinos selectos tienen un proceso más manual y casero, desde la plantación y cuidado de la vid, pasando por la recolección, el transporte y la confección.
La elaboración del vino se lleva a cabo mediante la maceración, luego el prensado, la fermentación, el trasiego, la clarificación y el embotellado.
Quizá pueda interesarte: ¿Cuál es el vino adecuado para acompañar tus comidas?
Otra de las razones por las que el vino es bueno para la salud es debido a la cantidad de polifenoles que presenta (que provienen de la cáscara y las semillas de las uvas).
Entre las propiedades de estos destaca la protección del corazón. ¿De qué manera? Eliminando los radicales libres.
El vino blanco, por ejemplo, se realiza con la pulpa solamente, por ello no contiene estas sustancias.
Según la variedad de la uva, la cantidad de sol y el terreno donde crecieron los racimos o la concentración alcohólica, tendrán más o menos polifenoles.
Fuente: Mejor con Salud