Según pymes, el aumento de ingresos brutos encarecerá un 20% los productos.
Ya es ley la suba de ingresos brutos para distintas actividades en Salta. Ahora empresarios pondrán el ojo en cómo se reglamentará esa iniciativa.
Insisten en que habrá una contracción en la economía local. Desde la Cámara Pyme estimaron que con un incremento del 38 por ciento de la alícuota, los productos se encarecerán entre un 15 y 20 por ciento en los primeros meses del 2018.
En el caso del comercio, la alícuota de ingresos brutos subirá del 3,6 por ciento al 5 por ciento el año que viene. Mayor será el peso de la medida en la construcción, que hoy tributa un 1,5 por ciento y en 2018 pasará a 3 por ciento.
El contador Álvaro Pérez dijo que al elevar un impuesto distorsivo, se afecta directamente la rentabilidad de las empresas. «Se deja a la mayoría con una dudosa capacidad para siquiera afrontar los costos fijos; impide cualquier proyecto de expansión, va contra la generación de empleo y abre más puertas a la informalidad», detalló.
El contador Federico Saavedra explicó que la alícuota se aplica sobre el total de facturación neta de IVA. «Es sumamente distorsivo porque no tiene en cuenta si una empresa gana o pierde», agregó.
Los profesionales optaron por ser cautos al cuantificar el traslado de la suba a los precios para el consumidor, ya que el incremento impositivo es diferente en cada actividad, pero coincidieron en que se harán sentir fuerte los efectos.
La industria estaba exenta y desde el próximo año pagará un 2 por ciento. El sector manufacturero volverá a tener tributo cero en 2022, a través de una escala anual descendente.
«Evidentemente las reformas no contemplan la angustiante situación que están pasando las economías regionales y la fragilidad en la que se encuentran los emprendedores, comerciantes, productores y empresarios salteños», comunicaron desde la Cámara Pyme.
A los empresarios les resulta llamativo «la inacción de los gremios frente a esta realidad que afectará a sus asociados desde el momento que se hagan efectivos estos aumentos».
Argumentan que habrá una disminución de la capacidad de consumo, ya que el sueldo perderá valor. «Al estar atadas las paritarias a las negociaciones nacionales, estas subas provinciales no se van a contemplar en los incrementos de sueldos».