Datos alarmantes.
La parálisis de la obra pública, en supuesta revisión, utilizada para llegar un equilibrio fiscal dibujado y la recesión económica con inflación altísima y pérdida de poder adquisitivo mantiene la actividad de la construcción en sus mínimos valores desde la salida de la pandemia. La actividad retrocedió 42 por ciento en marzo en términos interanuales, los despedidos suman 100 mil (casi el 80% de los registrados en el último semestre fue bajo el gobierno de Javier Milei) y se encuentran en riesgo una cantidad similar. Mientras tanto, los salarios en algunas provincias ya perdieron más del 46 por ciento frente a la inflación en apenas un año. En tanto, los proveedores de insumos, en su mayoría oligopolizados incrementaron los costos de materiales en los últimos doce meses –medidos hasta abril— subió 302 por ciento, por encima de la ya elevada inflación (289 por ciento).
En el último informe de la consultora Orlando Ferreres y Asociados destaca el derrumbe de la actividad en abril, de 22,1 por ciento frente a igual mes del anterior, mientras que en el acumulado del 2024 la caída interanual alcanza al 20,7 por ciento, siendo el sector industrial más afectado por las políticas de ajuste del gobierno libertario. La cifra acumulada de despidos supera los 100.000 empleados si se tienen en cuenta las actividades ligadas a la construcción, y otros 200.000 que están en peligro, según señalan desde la UOCRA.
Desempleo del sector e inflación
“A nivel nacional, se contabilizaron 354.428 empleos registrados en la construcción; el menor volumen de empleo desde agosto de 2021. Dicha cifra equivale, en la comparación interanual, a una baja del 20,6 por ciento (quinto mes consecutivo de bajas interanuales). Se trata del descenso relativo más significativo de los últimos cuarenta meses (se debe remontar a noviembre 2020 para ver una caída superior, que fue en ese momento de -21,1 por ciento); además, equivale a la pérdida de 91.929 empleos en relación con marzo del 2023”, señala la consultora Politikon.
Con los costos por las nubes y los salarios por el piso, las proyecciones no son positivas. En las últimas semanas se encareció fuertemente el costo para construir. Tal es así, que en los últimos tres meses, el mismo creció más del 80 por ciento. En un año el costo en materiales aumentó 312 por ciento. En consecuencia, la superficie autorizada acumulada durante el primer bimestre de 2024 en su conjunto, registró una baja de 5,2 por ciento con respecto al mismo período del año anterior. Se trata del primer paso para empezar a construir.
El impacto se registra directamente en el empleo, registrado e informal. En el caso del registrado, marzo tuvo su peor caída en 40 meses en todo el país. La situación es igualmente negativa al observar la comparación mensual: se registró una baja del 2,1 por ciento respecto al mes anterior (febrero 2024) perdiendo así 7.672 empleos formales en el sector en solo ese mes y acumuló su séptimo descenso al hilo.
Al acumular estas siete bajas mensuales, desde septiembre 2023 a marzo 2024 desaparecieron 90.240 empleos formales en el sector de la construcción; y 67.811 se perdieron desde diciembre a marzo último. Es decir, el 75 por ciento de esos despidos se produjeron bajo la gestión de Javier Milei.
Desempeño a nivel regional
El análisis del empleo por regiones evidencia la situación altamente contractiva del sector. En la medición interanual, todas las regiones cerraron marzo con descensos altamente heterogéneos pero igualmente de fuerte magnitud: la Patagonia con -11,3 por ciento registró la más leve; pero en el NEA la caída alcanza el 53,7 por ciento, cifras que no se vieron siquiera en plena pandemia. Respecto al resto de las regiones, la Pampeana y el AMBA mostraron caídas inferiores al nivel nacional (-17,1 y -16,9 por ciento respectivamente) mientras que el NOA y Cuyo lo hicieron por encima de la misma (-23,7 y -32,8 por ciento respectivamente).
En la medición mensual, salvo la Patagonia (creció 0,6 por ciento por impulso de Neuquén) también todas las regiones presentaron bajas: la más leve se observó en la Pampeana con -1,7 por ciento al tiempo que Cuyo exhibió el descenso más fuerte del mes (-5,4 por ciento).
En relación con los desempeños provinciales, se agravaban las caídas para la gran mayoría de los distritos. Evaluando la variación interanual, al igual que se vio en febrero pasado, solo un distrito sostiene alzas aunque desacelerando: Salta (1,9 versus 9 por ciento de febrero); por el contrario, todas las demás jurisdicciones subnacionales presentan bajas y diez en particular lo hacen a un ritmo mayor al -40 por ciento. En este marco, los descensos más fuertes estuvieron en Chaco (-62 por ciento) y Formosa (-65,5 por ciento). La posición de estas dos provincias como las de mayores caídas relativas interanuales se repite por sexto mes consecutivo.
En la comparación mensual, el escenario es similar: solo se observa alzas en un distrito (Neuquén con 4,5 por ciento, situación que motivó que la Patagonia en su conjunta vea una leve alza mensual como se especificó previamente), mientras que en los restantes distritos se registraron descensos, siendo la de La Pampa la más fuerte (-11 por ciento), única en caer en doble dígito.
Salarios por el subsuelo
El salario promedio a nivel nacional en el sector de la construcción se ubicó en torno a los 579.855 pesos en marzo, exhibiendo una pérdida real frente a la inflación del 16,5 por ciento interanual.
Se trata del quinto mes consecutivo de bajas y el cuarto que está por encima del -10 por ciento real, aunque desaceleró respecto a la caída de febrero (-18,5 por ciento) producto de la aplicación del convenio paritario (éste generó que en la comparación mensual el salario de marzo crezca 11,7 por ciento real contra febrero).
Hacia dentro del territorio nacional, dos distritos presentaron subas reales interanuales (por encima de la inflación) en marzo: Neuquén y Salta (0,5 y 4,8 por ciento real interanual, respectivamente); mientras que el resto de los distritos presentó bajas, siendo las más fuertes las registradas en San Luis (-31,4 por ciento) y Santa Cruz (-46,1 por ciento).
