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Lejos de la crisis de los misiles que en los años 60 puso al mundo al borde de una guerra nuclear, Cuba vuelve a ser escenario de un juego de guerra que enfrenta a Rusia con Estados Unidos.
Un submarino de la Armada de Estados Unidos llegó este jueves a la Bahía de Guantánamo, en el este de la isla, en una demostración de fuerza que busca contrarrestar el impacto de la llegada a La Habana de una flota de buques de guerra rusos para realizar ejercicios militares planificados en el Caribe.
El Comando Sur de Estados Unidos indicó que el USS Helena, un submarino de ataque rápido de propulsión nuclear, llegó a aguas cercanas a la base naval estadounidense en Cuba, un día después que una fragata rusa, un submarino de propulsión nuclear, un petrolero y un remolcador de rescate cruzaron a la Bahía de La Habana tras realizar ejercicios en el océano Atlántico.
Cómo son los ejercicios navales en Cuba
En 1962, la entonces Unión Soviética y Estados Unidos estuvieron a un paso de desencadenar una guerra nuclear. El conflicto que casi detona una crisis atómica fue la instalación de misiles nucleares de alcance medio instalados por el ejército soviético en Cuba. Finalmente, por las advertencias de Washington, Moscú retiró el arsenal de la isla.
Ahora, ambos países volvieron a mostrar sus músculos militares alrededor de la isla, ubicada a solo 140 kilómetros de las costas de la Florida.
Según AP, el submarino estadounidense llegó a la isla, como parte de una “visita al puerto de rutina”, dentro de la base naval en poder de Washington, en el este de Cuba.
Otros barcos estadounidenses también han estado rastreando y monitoreando los ejercicios rusos, que según funcionarios del Pentágono no representan una amenaza para Estados Unidos.
“Esto no es una sorpresa. Los hemos visto hacer este tipo de escalas en puertos antes”, dijo el miércoles la portavoz del Pentágono, Sabrina Singh, cuando se le preguntó sobre los ejercicios rusos. “Por supuesto que nos lo tomamos en serio, pero estos ejercicios no representan una amenaza para Estados Unidos”.
Sin embargo, los ejercicios se producen menos de dos semanas después que el presidente Joe Biden autorizara a Ucrania utilizar armas proporcionadas por Estados Unidos para atacar dentro de Rusia y proteger Járkiv, la segunda ciudad más grande de Ucrania. El presidente ruso Vladímir Putin sugirió luego que su ejército podría responder con “pasos asimétricos” en otras partes del mundo.
Singh dijo que no será una sorpresa ver más actividad rusa alrededor de Estados Unidos en ejercicios globales de este tipo. Los simulacros se realizan en aguas internacionales y las autoridades estadounidenses esperan que los barcos rusos permanezcan en la región durante el verano y posiblemente también hagan escala en Venezuela.
Rusia es un viejo aliado de Venezuela y Cuba, y sus buques de guerra y aviones han realizado periódicamente incursiones en el Caribe. Barcos rusos han atracado ocasionalmente en La Habana desde 2008, cuando un grupo de embarcaciones rusas entró en aguas cubanas, en lo que los medios estatales describieron como la primera visita de este tipo en casi dos décadas. En 2015, un barco de reconocimiento y comunicaciones llegó sin previo aviso a La Habana un día antes del inicio de las conversaciones entre funcionarios estadounidenses y cubanos sobre la reapertura de relaciones diplomáticas.