Llamado a la paz.
En el rezo de este domingo frente a la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco repudió la creciente ola de violencia en Medio Oriente e hizo «un llamamiento urgente» para evitar el crecimiento de «una espiral de violencia«.
Ante el lanzamiento de drones y misiles por parte del gobierno iraní que obtuvo una repercusión internacional, el Sumo Pontífice abogó por la paz en el mensaje de este domingo y pidió a las naciones interceder para detener el conflicto. «Hago un llamamiento urgente para que se detengan todas las acciones que pueden alimentar una espiral de violencia con el riesgo de llevar a Oriente Medio a un conflicto aún mayor», expresó.
En esa línea, el Papa también se refirió al conflicto entre Israel y Hamás y remarcó: «Nadie debe amenazar la existencia de los demás, todas las naciones deben ponerse del lado de la paz y ayudar a israelíes y palestinos a vivir en dos Estados, en seguridad. Es su deseo legítimo y es su derecho. No más guerra, no más atentados, no más violencia, sí al diálogo y sí a la paz«.
Asimismo, enfatizó en que la guerra es siempre «una derrota, un camino sin rumbo que no abre perspectivas sino que apaga la esperanza». Desde la ventana del Palacio Apostólico, el Papa pidió que «con determinación se ayude a la población precipitada en una catástrofe humanitaria y se se libere rápidamente a los rehenes secuestrados hace meses», y concluyó: «¡Cuánto sufrimiento!, recemos por la paz».