La foto de Cristina Kirchner esposada, trasladada a una cárcel por policías, es lo que quieren evitar en el gobierno, coincidieron este miércoles fuentes cercanas al presidente Javier Milei, como manera de evitar que una situación de ese tipo sea interpretada por el peronismo como una provocación y termine derivando en una escalada de violencia.
Detención de Cristina Kirchner
Desde la Casa Rosada enviaron un mensaje conciliador a Cristina Kirchner para evitar una escalada de violencia. Dicen que esperan un traslado «respetuoso» de la expresidenta a su lugar de detención y preparan operativos de seguridad por las protestas.
“No queremos hacer un show con la detención de Cristina” Kirchner, dijo a A24.com una fuente de la Casa Rosada que este miércoles, tras el primer día de protestas dispersas de militantes peronistas en apoyo a la expresidenta, amenazaban con expandirse al Congreso y a la Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada.
Incluso, una alta fuente cercana a Javier Milei elogió la actitud de la expresidenta en su primer discurso desde el balcón de su casa ante militantes, en la noche del martes, tras conocerse el fallo en su contra:
“Es notable que Cristina no salió a pedir que salgan a romper todo”, evaluaban en el gobierno libertario mientras especulaban sobre los próximos pasos que dará la expresidenta.
“Como va a ser el traslado y la detención, dependerá de lo que decida hacer Cristina”, agregaron en la Casa Rosada, para volver a despegarse de responsabilidad en las denuncias de persecución política y proscripción contra la líder del PJ.
Pero hay tensión e incertidumbre sobre como sigan las protestas en las próximas 72 horas.
Desde el entorno de Cristina Kirchner confirman a A24.com que ella “va a ajustarse a derecho como siempre hizo en todo el proceso injusto”.
En ese marco, confirman desde el entorno de la expresidenta que de acuerdo a lo resuelto por la justicia, Cristina “debe presentarse, eso es lo que corresponde. Tiene plazos y los va a cumplir, cuando decida lo va a comunicar”.
En el entorno del presidente Javier Milei -quien seguirá de gira en el exterior hasta el sábado- afirman que van a actuar con total “cautela” y prevención para no generar una provocación a los militantes que rodean el domicilio de Cristina, en el barrio porteño de Constitución.
Mientras transcurre el plazo de 5 días que le dio la justicia para que la expresidenta condenada a 6 años de prisión e inhabilitación de por vida a ejercer cargos públicos en la causa por corrupción en Vialidad, se presente por propia voluntad a los tribunales de Comodoro Py, en Retiro, para quedar detenida. Según versiones, Cristina podría convocar a una movilización del peronismo para que la acompañe.
Otra opción que evaluaban en el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, es que si Cristina no se presenta ante la justicia, el juez Jorge Gorini ordene su detención.
En ese caso, las fuerzas federales, como la Policía Federal o Gendarmería, tendrían que ir a buscarla a su domicilio en medio de las protestas de militantes, para trasladarla a una cárcel transitoria, hasta que la justicia apruebe el pedido de detención domiciliaria presentado por la expresidenta en su departamento de Constitución.
Una tercera opción que avalaban en el Gobierno y la más conveniente para todos, sería que el juez autorice directamente por escrito, sin necesidad de traslado, la prisión domiciliaria de Cristina en su casa de Constitución.
Este miércoles, como cada miércoles sucede con la marcha de jubilados, se sumarán convocatorias de militantes kirchneristas y de gremios en apoyo a Cristina Kirchner, tanto en el Congreso como en distintos puntos de la ciudad, y de la provincia, incluyendo la Casa Rosada.
En un comunicado este miércoles, el PJ nacional convocó a sus militantes a “pelear por la democracia y las instituciones”, mientras que desde La Cámpora convocaron a la movilización junto a los jubilados en Congreso.
Por eso, en Casa Militar, el organismo a cargo de la seguridad de la Casa Rosada, ordenaron operativos de seguridad especiales preventivos ante las convocatorias de protestas que desde el Congreso podrían dirigirse más tarde hacia la Casa Rosada.
Cerca de Milei especulan con que “una vez definida la situación de detención” de Cristina Kirchner, “el clima político tenderá a calmarse”.

