En La Caldera habrá un Paseo del Carnaval en donde se destaca el Encuentro de Copleros, artesanos y un gastronomía regional al paso.

Ni el Diablo del Carnaval se salvó de la cuarentena; debe andar solito buscando un intersticio para escaparse del COE. Quizás en La Caldera encuentre su alivio y pueda salir en algún mojón familiar para ofrecer su vinito y su alegría por este tiempo de pandemia.

Para mañana está programado el Encuentro de Copleras, en la explanada que brinda el Paseo de la Costanera. «Desde el Municipio  se promueve el turismo porque consideramos que es una manera de fomentar el trabajo genuino. Por eso aprovechamos este espacio, recientemente inaugurado, al que bautizamos como Eco La Caldera Multiespacio sobre el Paseo Costanera. No habrá Carnaval oficial, pero se llevará a cabo la Feria de Carnaval con encuentro de copleros», dijo el intendente de La Caldera, Diego Sumbay.

«Además desde el mediodía se podrá disfrutar de la exposición de productos de artesanos y emprendedores que estarán ubicados con sus stands sobre el paseo ribereño. Tenemos como novedad la gastronomía regional al paso. Todo está pensado para para que los visitantes tengan una dinámica al aire libre para prevenir los contagios», dijo el subsecretario de Cultura, Turismo y Deportes, Gonzalo Quipildor.

Las actividades comienzan desde las 12 con los feriantes, los artesanos y la gastronomía al paso. A las 15 comenzarán los amistosos de Beach Voley y a las 16 le darán el espacio a las copleras que llegarán desde todos los parajes con su cajas, sus rimas y sus risas pícaras. También invitaron a los copleros que oficiarán de «sparring» para los contrapuntos más picantes de la tarde.

«Qué pasará
no escuchó cantar
ni los grillos al atardecer.
Callados los bagualeros
Tal vez queriendo, tal vez sin querer
ni el viento salamanquero
sopló para no dejarse ver

(Por culpa del Carnaval, de La Moro)

Para la hora donde los duendes salamanqueros dejan de jugar, parece que todo decantará en casa de María Reynaga, aquella mujer que viene siendo la madre del Carnaval en La Caldera desde ha más de 20 años.

María tiene un espacio al aire libre en el ingreso al pueblo, pasando el puente, donde el camino se hace una «T», donde el verde asombra. Con mesas y sillas que tienen las marcas de colores de los carnavales pasados y donde se respira el humo de la leña mezclada con la albahaca tropical.

«Estamos tristes porque no podrán venir todos los que antes venían. Ahora por prevención seremos muchos menos. Lo mismo estamos contentos porque es el tiempo de estar alegres», dijo María mientras prepara las comidas que vende. Ella comanda un batallón de gente que ya casi tiene todo listo para recibir a los visitantes con empanadas, tamales, humitas y diversas carnes asadas. También tiene lista su caja, su coca y su chicha. No se debe subestimar a la jornada con protocolo.

«Yo tengo más de 70 años y desde los 15 copleaba. Los escuchaba a mi papá y a mi mamá para el tiempo de la siembra y de ahí comenzábamos a hilar las rimas», dijo María con sus ojos iluminando Potrero de Castilla, de donde viene, donde están sus raíces. El recuerdo de Gerardo Calisaya y Juana Llañes la llevan a un trago de vino manso, los piensa, los recuerda y cuenta. «El vínculo con la Madre Tierra era muy fuerte. Cuando comenzaba la siembra de la papa se buscaba la más grande y se abría la Tierra en el comienzo del primer surco. Allí le pedíamos permiso y buena cosecha a la Pachamama. Cada cosa que hacíamos en mi casa de la infancia le pedíamos permiso a la Madre Tierra. Y ahora también vamos a pedir permiso y vamos a abrir el mojón para que salga el Diablo loco del Carnaval. Sólo que ahora ya no serán esos festejos con toda la gente que venía, sino que haremos esa ceremonia ancestral en la intimidad de la familia», dijo María.

Su emprendimiento se llama «Sabor a Campo», en él trabaja gran parte de su familia y además tiene que contratar a otras personas.

La idea que mencionaba Sumbay por ahora cierra en plena pandemia con restricciones. El único encuentro seudo carnavalero del área metropolitana de Salta se realizará en La Caldera y sus anfitriones se preparan para recibir de la mejor manera a sus visitantes. Desde el Municipio apuestan fuerte al turismo de los salteños y sus vecinos ponen todas sus fichas a recuperarse tras un 2020 que destruyó las economías regionales.

Deporte y poesía

El domingo pasado se inauguró, en el Paseo Costanera sobre el ingreso al pueblo, la cancha de beach vóley y El Bosque de La Poesía en el Eco La Caldera Multiespacio, un lugar donde se conjuga el deporte, la cultura y la promoción del cuidado del medio ambiente, ubicado a escasos metros del río La Caldera.
El domingo habilitarán la cancha de Beach Voley para quienes deseen practicar la disciplina en compañía de la familia o grupo de amigos.

Para mañana partir de las 16, hombres y mujeres de La Caldera y alrededores se reunirán como antaño para coplear. A través del programa Cultura en Movimiento del Gobierno provincial, este domingo también se presentará en un show en vivo del artista Hermógenes Quipildor, que presentará su repertorio folklórico, y de la banda de cumbia local “La Fusión”.

El evento se llevará a cabo en el amplio espacio abierto que ofrece el Paseo Costanera sobre el ingreso al pueblo. Se respetarán las medidas sanitarias preventivas y se insiste en que los visitantes respeten las distancias permitidas y estén atentos a las indicaciones del personal municipal a cargo de la actividad.
El Eco La Caldera Multiespacio fue pensado para las manifestaciones culturales e intervenciones artísticas. El domingo último El Bosque de La Poesía tomó fuerza y se plantaron los primeros ejemplares de especies nativas.
Teuco Castilla, Inés Brandan Valy, Cristian Adep, Rolando Vargas y Marcelo Sutti fueron los impulsores de la iniciativa y matizaron la jornada con poesía y textos de su autoría.

Fuente: El Tribuno