Estuvo internado diez días tras haber contraído COVID-19. Tenía 57 años y ganó once campeonatos de Turismo Carretera
Golpe fuerte para el automovilismo argentino luego de conocerse el fallecimiento de Alberto Canapino, uno de los mejores preparadores del país y que alistó a once autos que fueron campeones del Turismo Carretera, entre ellos los cuatro que logró su hijo Agustín Canapino en 2010 y de 2017 a 2019. El chasista falleció a los 57 años luego de padecer COVID-19.
Canapino padre contrajo el virus hace diez días y según informó una fuente cercana a la familia, no tenía enfermedades preexistentes. Estaba internado en el Sanatorio Otamendi de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y ayer se complicó su estado por lo que fue derivado a terapia intensiva. Hoy a las 14:15 su cuadro se complicó y falleció tras sufrir un paro cardíaco.
La noticia fue un mazazo para todos los suyos en una jornada en la que a las 15:00 horas estaba pactada la presentación del auto de Agustín, la cupé Chevrolet con la que el piloto de Arrecifes iba a luchar para recuperar el campeonato.
Inserto de lleno en el automovilismo grande, llegó el primer campeonato de TC de la mano de Juan María Traverso. Fue en 1995 cuando le alistó el Chevrolet al Flaco de Ramallo, misma temporada en la que estuvo a cargo del Peugeot 405 de TC 2000 con el que el propio Traverso logró su último título en la especialidad. Ambos repitieron la gloria en el TC en 1996, pero para 1997 se rompió el vínculo.
Sin embargo, en 1998 se reivindicó de la mano de un joven de 25 años llamado Guillermo Ortelli, que en ese momento fue el campeón más joven del TC, también con un Chevrolet. Luego Alberto obtuvo otros campeonatos en la popular categoría preparando los autos de Juan Manuel Silva (Ford/2005), Norberto Fontana (Dodge/2006) y Christian Ledesma (Chevrolet/2007).
Aunque el joven Agustín demostró de qué estaba hecho y en 2008 ya ganó su primera carrera en el automovilismo grande, fue en el Top Race, en La Plata. Ese año también se coronó en el TC Pista, siempre con la atención en el chasis de su padre, y en 2009 se dio el debut en el TC, donde en 2010 batió el récord de precocidad de Ortelli con apenas 20 años. La dupla Canapino-Canapino repitió sus laureles entre 2017 y 2019, para redondear los once campeonatos en el TC como chasista, una marca inigualable hasta hoy. Fue campeón con tres de las cuatro marcas y solo le faltó coronarse con Torino.
En 2020 estuvieron cerca, pero algunas fallas con los motores le impidieron a Agustín llegar con posibilidades reales a la última fecha corrida en San Juan. Este año iba por la revancha y había reforzado su estructura con la de otro equipo, el RUS Med de Mauro Medina y juntos conformaron la flamante Squadra Canapino con base en Arrecifes. Había muchas expectativas en el próximo fin de semana en La Plata, donde el TC arrancará su temporada 2021. Ya no será lo mismo para Agustín, no tendrá a su preparador por excelencia y por sobre todo, ya no tiene a su padre.
Mejora constante
Además, llegó a involucrarse en el Dakar con un vehículo que preparó un vehículo ciento por ciento argentino para la categoría autos, que supo completar la carrera más dura del mundo.