El Muñeco logró volver a tener a ciertos futbolistas, sobre todo de la mitad de la cancha, en un nivel alto.
Cierto es que desde el regreso de Marcelo Gallardo como entrenador, River cambió su cara. Y es que, tras la goleada ante Atlético Tucumán, el técnico sostuvo que había visto «un equipo lo más parecido a lo que tal vez me gusta ver de mis equipos«. Lo cierto es que con el correr de los partidos -con el Superclásico y el pase a semifinales de Libertadores en el medio-, se observó que el Muñeco no solo mejoró al Millonario en cuanto a lo futbolístico sino que también logró recuperar el nivel de confianza en cinco futbolistas en particular: Leandro González Pirez, Matías Kranevitter, Santiago Simón, Nacho Fernández y Facundo Colidio.
Yendo desde abajo para arriba, y si bien con Martín Demichelis en el banco era titular, González Pirez alternaba buenos y malos rendimientos que ocasionaron el arribo de Federico Gattoni a las filas del Millonario. Consumado el ciclo de Micho, Gallardo abrochó la llegada de Germán Pezzella y se preveía que el defensor con pasado en Inter Miami iba a ser aún más relegado.
Sin embargo, y a pesar de que la zaga titular es ocupada por el campeón del mundo y Paulo Díaz, el ex Tigre consiguió ser la primera rueda de cambio para Gallardo en caso de que ocurra algo con sus compañeros. De hecho, fue el encargado de iniciar la remontada y goleada ante el Decano, además de ser el reemplazante del chileno -ya que fue expulsado- en la vuelta ante el Cacique en el Monumental.
En la mitad de la cancha es donde más soldados recuperó. Por un lado consolidó una posición disputada en el mundo Millonario como lo es el volante central. Con Rodrigo Villagra y Nicolás Fonseca, Gallardo optó por un viejo conocido como lo es Matías Kranevitter. Así como en la Libertadores 2015 fue indiscutido, en esta nueva etapa lo sigue siendo vital en la zona defensiva y de inicio del juego desde atrás.
Otro fortalecido de está seguidilla de partidos fue Santiago Simón. Mientras con Demichelis alternaba titularidades y suplencias, además de ser utilizado en ciertas ocasiones como lateral derecho, con el Muñeco se ganó un lugar como interno. «No hay muchos jugadores como Simón en el fútbol argentino. Tiene la capacidad de entender lo que el equipo quiere, buen pie, dinámica. Le pedí ajustar el tema de la llegada al área y defender cuando toca, y estoy seguro que está para hacerlo y que lo hará mejor jugador», afirmó el entrenador luego del 4-1 contra Atlético Tucumán.
Y en medio del ascenso de joyas como Claudio Echeverri y Franco Mastantuono, el entrenador alterna con ellos para darle confianza a Nacho Fernández. El ex Gimnasia -a quien le convirtió un gol, cumpliendo la ley del ex-, a pesar de la posterior llegada de Maximiliano Meza es una de las fijas en el once habitualmente.
Por último, y sobre todo luego de los últimos dos encuentros, Facundo Colidio salió fortalecido para ser dupla de ataque junto a Miguel Borja. El ex Tigre fue muy participativo en el Superclásico, lo que le posibilitó ser titular ante Colo-Colo en el Monumental. Allí no decepcionó y fue el encargado de darle la clasificación a la institución de Núñez a las semifinales de la Libertadores.
Con la recuperación de estos niveles, sumado al plantel con tres campeones del mundo, Marcelo Gallardo dispondrá de un fondo de armario amplio para intentar volver a prenderse en la Liga Profesional y mantenerse en lo alto de la tabla anual, ya que, en caso de ser eliminado de la Libertadores, es su única vía de acceso a la próxima edición del máximo certamen continental.
