10 consejos para prevenir la salmonelosis


25 noviembre, 2023


Consejos para cuidar la Salud.El verano es escenario de nuestros momentos de ocio, período en que es más habitual comer alimentos fuera de casa. No debemos olvidar algunos riesgos asociados a la estación del año más calurosa. Uno de ellos es el riesgo de contraer salmonelosis, una infección causada por la bacteria salmonela, que se produce por la ingesta de agua o alimentos contaminados.

En los países en vías de desarrollo es menos frecuente que sigan un protocolo de conservación y manipulación alimentaria como el de los países desarrollados, por lo que hay que tener cuidado al comer y beber ciertos alimentos sospechosos al viajar a estos países. A pesar del control que realiza salud pública, en los países occidentales en ocasiones también se puede contraer salmonelosis, habitualmente por comer carne contaminada o productos que incluyen huevos o leche no pasteurizada en mal estado.

 La leche no pasteurizada en mal estado puede ser la causa de una infección por salmonela :

Esta infección afecta al tracto intestinal. La bacteria se encuentra en los intestinos de personas y animales y se elimina del organismo a través de las heces. Los síntomas no siempre aparecen, pero los más frecuentes son diarrea, fiebre, vómitos, mareos, dolor de cabeza y calambres estomacales. Suelen aparecer horas después de producirse la infección y desaparecen habitualmente al cabo de unos días.

Puede causar la muerte

En la mayor parte de los casos se trata de infecciones leves que no precisan de un tratamiento concreto. A veces, a causa de la diarrea, se puede producir una deshidratación severa que obligue a acudir al médico. Y en algunos casos se puede agravar el problema y extenderse la infección a otros órganos. Cuando esto sucede hay que solicitar atención médica de inmediato. En países pobres, hay algunos tipos de la bacteria como la Salmonella typhi que produce fiebre tifoidea. Sus efectos son graves y pueden llegar a producir la muerte en personas con un sistema inmune deprimido, por lo que es importante acudir al médico lo antes posible frente a una sospecha de intoxicación alimentaria, especialmente en este grupo poblacional.

La salmonela suele estar en las cáscara del huevo La salmonela suele estar en las cáscara del huevo :

Entre los alimentos más frecuentes en el origen de la salmonelosis están los huevos si se consumen crudos o poco cocinados. La salmonela suele estar en la cáscara del huevo cuando está contaminado por heces de las gallinas que tienen la bacteria, por lo que es importante evitar que caiga cáscara dentro del huevo al cocinarlo y lavarnos las manos después de su manipulación. Nunca se deben lavar dada la porosidad de la cáscara. Otro alimento peligroso es la leche sin pasteurizar. El proceso de pasteurización mata las bacterias y permite el consumo de leche y sus derivados sin ningún riesgo. Las frutas y verduras deben lavarse bien porque pueden haber sido regadas con agua contaminada.

este tipo de infección :

Lavarse las manos con agua y jabón antes y después de manipular alimentos, después de ir al baño y después de tocar animales domésticos o de granja.

En la cocina evitar la presencia de animales, aunque sean las mascotas con las que convivimos a diario.

Lavar minuciosamente las frutas y verduras entes de su consumo. Es especialmente importante si se van a consumir crudas.

Asegurarse de que los alimentos no queden crudos. Cocinarlos a la temperatura necesaria para evitar posibles infecciones.

No guardar un alimento en el mismo recipiente en el que se ha cocinado. Esperar a que se enfríe y guardarlo en un recipiente nuevo.

Consultar la procedencia de los alimentos antes de consumirlos. En el caso de la leche debemos asegurarnos de que ha pasado por el proceso de pasteurización.

No mezclar las carnes crudas con el resto de los alimentos.

Seguir las normas de higiene adecuadas en la cocina y en las superficies donde se manipulan los alimentos, Mantener escrupulosamente limpios los utensilios que serán utilizados para preparar comidas.

No debemos usar los mismos utensilios, por ejemplo, la misma tabla de cortar o el mismo plato, para manipular alimentos diferentes como carne cruda o verduras.

Si un alimento cocinado no va a ser consumido en un plazo breve de tiempo (máximo de dos horas), es conveniente refrigerarlo o congelarlo.

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