Política
Rodríguez Larreta miró las últimas encuestas y se convenció que ganaría cómodo un mano a mano contra Mauricio Macri. «Le gana 60 a 40, la imagen negativa de Mauricio no se movió», afirman sus allegados.
El jefe de Gobierno le dice a quien quiera escucharlo que no sólo no tema un enfrentamiento con Macri, sino que lo cree conveniente. «Nos permitiría zanjar la disputa de liderazgo», resume. Pero en su entorno están convencidos que el ex presidente no buscará regresar a la Casa Rosada. «Se fue un mes a Qatar, es bastante claro que no está pensando en candidatearse», agregan.
Larreta es muy consciente que Macri estuvo jugando fuerte en derrumbar o condicionar al máximo su candidatura, sobre todo apuntando a desarmarle su principal carta electoral: la postulación de Diego Santilli en la inmensa Buenos Aires. Pero no lo va a cruzar fuerte. «No quiero y no me conviene, quedaría como un desagradecido», repite el jefe de Gobierno y se ríe de los que «minimizan» el nivel de diálogo que mantiene con Macri. «Hay años de confianza construida», insiste.
Desde Qatar, Macri no parece tan conciliador. Luego que Larreta lanzara la candidatura a jefe de Gobierno de Fernán Quirós, el ex presidente buscó reposicionar a su primo Jorge. Macri no considera a Quirós un candidato serie. «No existe», resume en la intimidad.
El fundador del PRO estuvo al tanto de la visita que este martes hizo Néstor Grindetti a Jorge Macri en la sede del gobierno porteño de Uspallata. Enfrentado a Larreta, el intendente de Lanús ya había hecho público su respaldo al ministro de Gobierno porteño, pero buscó reforzar la idea días después de que Larreta lanzar a su ministro de Salud, que tiene la mejor imagen de la Ciudad. En el entorno de ambos dirigentes dijeron que la foto se planeó para que Grindetti repitiera su apoyo.
Nada de esto parece impactar en el entorno de Larreta, donde apuestan a un próximo respaldo de María Eugenia Vidal a Quiros, que se sumaría al de Lilita Carrió. «Horacio tiene dos candidatos, Fernán y Soledad Acuña», explican. «Decían que iba a entregar la Ciudad a los radicales, se equivocaron», se jacta Larreta.
Un mensaje directo a Patricia Bullrich y otros supuestos «halcones» que trataron de instalar esa idea cuando Larreta se visitó el acto radical de Martín Lousteau y Gerardo Morales en Costa Salguero.
En Uspallata aseguran que en rigor el problema de Patricia es que el regreso al centro de la escena de Macri la diluye y por eso salió a cruzarlo. «Todo el mundo se da cuenta que la pelea de poder es entre Macri y Larreta, por eso se enoja Patricia con la reaparición de Mauricio», explican.
Y todo indica que el jefe de Gobierno está dispuesto a repetir su estrategia del 2021. No hablar «en serio» con macri hasta el momento del cierre de listas, para ir llevándolo y sobre el final dejarlo con poco margen de reaccion ante decisiones que no comparte. Macri ya se dio cuenta, la gran duda es si tiene algún otro resorte además de su candidatura, para bloquear esa estrategia.
En Uspallata señalan que Macri sigue muy golpeado en el Conurbano como para soñar con otro mandato presidencial. «Para presionar tenés que tener un arma», dicen cerca del jefe de Gobierno.
Como sea, Larreta empezó a definir. Quirós y Santilli son los más visibles, pero también ya eligió candidatos en las provincias más conflictivas: En Córdoba su candidato es Luis Juez, a quien Macri detesta. Y en Tucumás el intendente peronista Germán Alfaro. En Chubut el joven senador Ignacio Torres y en Entre Ríos Rogelio Frigerio.
Emilio Monzó ya está descartado como armador nacional y a falta de mejores opciones, Larreta continuará con su amigo Eduardo Macchiavelli y el mendocino Omar De Marchi. Pero quienes lo siguen de cerca saben que los cierres importantes se los reserva el propio Larreta.
El poco tiempo que le queda lo dedica a revisar el plan económico, una carrera entre Carlos Melconian y Hernán Lacunza. El primero preferido por Macri y el segundo apoyado por los radicales, gracias a la amitad del ex ministro con el economista radical Eduardo Levy Yeyati.
