El Gobierno celebró como un logro importante la media sanción de la ley de Presupuesto 2023 en la Cámara de Diputados y espera un rápido tratamiento desde la semana que viene en el Senado, con la ayuda de la vicepresidenta Cristina Kirchner. Con la coalición de Gobierno fragmentada políticamente por la crisis económica, ahora el Gobierno se verá obligado a acelerar la materia que tiene pendiente: la recomposición salarial urgente.
El Gobierno celebró la aprobación del Presupuesto 2023 en Diputados y espera un tratamiento exprés en el Senado. Ahora la mayor tensión está en la pelea salarios vs. inflación.
El desafío del Gobierno ahora es cumplir la promesa hasta ahora incumplida para que «los salarios le ganen a la inflación«.
Tanto en el gremialismo como en las más altas esferas del poder debaten si reabrir paritarias o si mejor antes dar un bono con suma fija.
La pelea que se viene: Salarios vs. Inflación
Esta semana el Gobierno cerró varias paritarias cercanas al 98%, mientras se complica la negociación de Camioneros que no aceptaron la propuesta empresaria y amenazan con convocar a un paro nacional para el próximo lunes si «no les dan lo que merecen», según palabras del veterano jefe del gremio, Hugo Moyano.
La batalla continuará estos días con la paritaria del sector de Camioneros, que piden un aumento del 131% lejos de la propuesta que hicieron los empresarios. Llamó la atención este miércoles la dureza de Moyano padre, que hasta ahora se mostraba más cercano a la postura moderada del Gobierno y de los «gordos» de la CGT.
Moyano recordó el antecedente del extenso paro del gremio de Neumáticos, que durante meses puso en riesgo el abastecimiento en todo el país.
El enojo de los jeques sindicales radica en que el Gobierno -la ministra Kelly Olmos lo dijo con todas las letras- le puso un techo a las renegociaciones paritarias: que no superen el 100%, para que no hagan crecer aún más la inflación.
Un anticipo de la pelea que afronta la nueva ministra de Trabajo designada por Alberto Fernández, fueron los cierres de paritarias producidos esta semana. En ningún caso superaron el 100%, y cerraron avaladas por el Gobierno con variaciones entre el 90 y el 95%. Tal es el caso de la Federación de Trabajadores del Complejo Industrial Oleaginoso, Desmotadores de Algodón y Afines (Ftciodyara), el Sindicato de Obreros y Empleados Aceiteros de San Lorenzo (SOEA) y las tres cámaras empresarias de la actividad aceitera que anunciaron una mejora del 98% anual, hecho que elevó el salario básico de esos trabajadores a $221.000.
¿Cuánto perdieron los salarios frente a la inflación?
Según una actualización del cálculo de Pérdida y Canasta de Ingresos mínimos difundido por la CTA, los salarios de empleados estatales, jubilados y desocupados son «víctimas de una inflación sin freno a la que ya, prácticamente, no se le oponen medidas de gobierno, que sigue priorizando el pago de la deuda externa».
Los gremios estatales también profundizan la presión sobre la Casa Rosada y los ministerios de Economía, Trabajo y de Desarrollo Social por un aumento de suma fija antes de fin de año en salarios y bonos y planes sociales.
«No alcanza con un refuerzo alimentario; es necesario e imprescindible un programa que garantice un ingreso para quienes no tienen trabajo o el que tiene está por debajo de la CBT fijada por el INDEC al medir la pobreza», señala el documento al que tuco acceso A24.com.
Los gremios, pero también los intendentes del conurbano, coinciden en que también «es insuficiente el programa de Precios Cuidados» para frenar la inflación y reclaman que «se acompañe con una fiscalización por parte del Estado que garantice el abastecimiento en las grandes cadenas de supermercados y, también, en los negocios de cercanía de los barrios populares».
La variación del nivel general de los precios de septiembre fue de 6,2 %, con un acumulado interanual del 83%. Resta saber si la inflación de octubre, noviembre y diciembre seguirá subiendo en los mismos niveles cada mes, o baja como promete el gobierno, al 5 o 4% mensual.
En ese marco, los estatales -que suelen ser usados de modelo para otros sectores- siguen planteando «el adelantamiento de una cuota de la pauta salarial por la pérdida ante la inflación, que fue en septiembre del 7 % y amenaza con repetirse aumentos similares en octubre y noviembre, cuando entren en vigencia las boletas de tarifas de servicios públicos sin subsidios del Estado eso podría empeorar un 2 % más.
«Tanto los especialistas del tema, como el REM4 , plantean una inflación del 100% para el corriente año, y para el próximo año una inflación de por lo menos un 90%, por arriba del 60% proyectado en el presupuesto 2023». En ese marco, «es probable que este año se llegue al 95%», señalan en la CTA.
Remarcan que el salario de referencia de diciembre 2015, actualizado a pesos de septiembre 2022 debería de ser $ 142.753, muy lejos de los $ 92.693 (que incluye la suma fija de $ 4.000.-), según la grilla salarial del SINEP de septiembre de este año.
El Gobierno reconoce el problema, pero admite que aún no hay una decisión tomada y que por ahora la única solución siguen siendo la reapertura de paritarias, sector por sector.
Mientras que el INDEC puso como umbral de la canasta básica para no ser pobre, en $128.214 en octubre. En ese marco, el equipo económico anunció que trabaja con 7 empresas alimenticias, el congelamiento de precios por 90 días, e intentará ampliar el programa Precios Justos a otros sectores. El problema es que los precios cambian y siguen subiendo todas las semanas.
Fuente: A 24
