Desde la institución religiosa advirtieron la necesidad de regular algunas actividades y no suspenderlas.
Mucha polémica generaron las actividades suspendidas por el Gobierno nacional y el acatamiento en Salta. Las actividades religiosas es una de ellas.
El Presbítero de la Catedral Basílica de Salta, Javier Romero cuestionó la decisión. Si bien aclaró que hay que acatar las restricciones impuestas por el Gobierno, repudió que se cierren las iglesias porque la fe es un servicio esencial. «Nos vuelven a decir lo que tenemos que hacer. No jueguen con nosotros», apuntó el sacerdote.
«Creo que no deberían haber cerrado las escuelas ni las iglesias, ni lo gastronómicos. Se podría haber regulado», consideró Romero sobre el confinamiento.
Fuente: Que pasa salta