El presidente de Brasil advirtió que está preparando para la salida de las Fuerzas Armadas para evitar un eventual «caos en Brasil» .
Bolsonaro volvió al centro de la escena con declaraciones polémicas. En esta ocasión en una entrevista con la periodista Sikêra Jr., del programa Alerta Nacional, de RedeTV en donde planteó que está preparando para la salida de las Fuerzas Armadas para un eventual «caos en Brasil» y «restablecer todo el artículo 5 de la Constitución» que establece el derecho a la libertad de circulación en el territorio nacional en tiempos de paz.
Esta amenaza del jefe estado es una nueva ofensiva contra las medidas restrictivas dictadas por los gobernadores y alcaldes ante el avance de los casos de coronavirus que han colapsado las terapias intensivas en casi todos los estados.
Bolsonaro habló jefe de las Fuerzas Armadas a las que se refirió como «nuestras» y advirtió que «si tuviéramos un problema, tenemos un plan sobre cómo ingresar al campo. Nuestro Ejército, nuestra Fuerza Armada, si es necesario, saldremos a las calles, no para mantener a la gente encerrada, sino para restablecer todo el Artículo 5 de la Constitución. Y si establezco eso, ese decreto se cumplirá».
Los dardos del presidente brasileño también están dirigidas a la Corte Suprema que rechazó una presentación del gobierno y delegó en los estados y municipios la responsabilidad de aplicar restricciones. Para Bolsonaro eso es «un poder excesivo que, lamentablemente, el STF ha delegado [a gobernadores y alcaldes]». «El artículo 142 habla de Ley y Orden», sostuvo descartando una intervención militar.
Este debate que incluye al presidente, las Fuerzas Armadas y la Corte Suprema tiene un trasfondo histórico vinculado con la idea de «Poder moderador».
La fila para almorzar frente a una organización benéfica católica en São Paulo. El número de personas que pasan hambre casi se ha duplicado en Brasil recientemente.
El abogado constitucionalista y profesor de derecho Ives Gandra Martins dijo en una entrevista con Poder360 que no es el presidente de la República, jefe supremo de las Fuerzas Armadas, quien decide una posible intervención sino los comandantes militares.
En este marco, el 20 de junio de 2020, el entonces presidente de la Corte, Dias Toffoli, hizo una declaración relacionada con el artículo 142 de la Constitución Federal. En la ocasión, el magistrado afirmó que la Corte «es la guardiana de la Constitución» y que «las Fuerzas Armadas como poder moderador ya no es posible».
«Si tuviéramos un problema, tenemos un plan sobre cómo ingresar al campo. Nuestro Ejército, nuestra Fuerza Armada, si es necesario, saldremos a las calles, no para mantener a la gente encerrada, sino para restablecer todo el Artículo 5 de la Constitución. Y si establezco eso, ese decreto se cumplirá»
Bolsonaro juega esta cartas en medio de una crisis social que le valió una tapa en el New York Times y un artículo en su versión en español titulado «Brasil, devastado por la covid, enfrenta una epidemia de hambre» que destaca el deterioro de los sectores más vulnerables.
Además, la puesta en funcionamiento de la Comisión Penal de Investigación abre la posibilidad por primera vez desde que asumió el gobierno de una juicio político. Si bien en el gobierno confían en sus aliados para evitar inconvenientes. «La CPI puede ser fatal», confió a LPO una fuente parlamentaria al tanto de los detalles de la investigación.
La realidad es que el escenario internacional, la vuelta al juego de Lula, las encuestas y la magnitud de la crisis hacen que Bolsonaro se radicalice y amenace con el uso de la fuerza militar. El problema, para Bolsonaro, es que el Ejército no está contento con un prestigio que puede ponerse en riesgo.
Es difícil pronosticar los próximos movimientos de Bolsonaro pero hay quienes dicen que «está buscando apoyo popular para un golpe». Hace un par de semanas, el presidente dijo estar «esperando una señal del pueblo» para intervenir contra las cuarentenas.
LPO