El gobierno envió un nuevo vuelo a Rusia para buscar cientos de miles de vacunas. Esta vez se pone el acento en las primeras dosis, para extender todo lo posible la inmunización de los mayores. La llegada de las dosis servirá de puente hasta el arribo de los tres millones de Sinopharm.
Un nuevo vuelo de Aerolíneas Argentinas partió en la madrugada de este jueves hacia Moscú para traer una nueva partida de Sputnik V. Como siempre, la cifra definitiva de dosis se sabrá cuando el avión cargue las cajas en el aeropuerto Sheremetyevo, pero en principio vienen varios cientos de miles –no alcanzará el medio millón, según parece– de la dosis 1. Este último dato es vital porque permitirá una primera inmunización de todas las personas a las que se le aplique la Sputnik V, mientras que si vienen dosis 2 serían complementos de los que ya están vacunados.
El vuelo de AR traerá el primer embarque desde el 3 de marzo o sea que se empieza a superar un bache de dos semanas sin provisión de vacunas. El arribo de las Sputnik establece una especie de puente para el embarque de vacunas chinas, tres millones de Sinopharm, que está previsto que lleguen la semana próxima. El punto crítico es que la Casa Rosada está esperando que la Anmat apruebe la aplicación de la Sinopharm para mayores de 60, lo que permitiría avanzar en la vacunación de las edades de riesgo.
Si la autorización se concreta, la vacunas chinas podrán ser usadas para personas en edades de riesgo, que son las franjas en las que hay mayor urgencia para reducir la mortalidad y las internaciones en terapia intensiva.
El vuelo de Aerolíneas para traer Sputnik, más los tres millones que vendrán de China, pondrán al país cerca de redondear unos ocho millones de vacunas recibidas antes de fin de mes. Y la idea es que lleguen otros ocho millones durante abril. En el contexto actual de guerra por las vacunas nada será fácil de concretar.
Fuente : Página12